La historia se centra en un chico llamado Yuichi que, después de 7 años de haberlo dejado, vuelve a un pueblo. Allí, se hospeda en casa de su tía y su prima. A partir de ahí, empezará a encontrarse con personajes que conoció hace aquellos 7 años.
Hacía muchísimo que tenía temor por ver este anime. Mucha gente igualaba la calidad de Air TV (ambos son obras de la corporación Key) con la de Kanon. Yo creo que la gente que me lo dijo tiene el concepto del gusto muy mal.A pesar de ser un anime bastante lento, sabe desarrollar la trama con historias preciosas. Los personajes están muy bien hechos, además de su gran OST.
Aunque, dejando eso a un lado, lo que más me ha gustado de Kanon ha sido su manera de saber unir la realidad con lo sobrenatural de una forma tan superficial. En concepto de los sueños y los milagros son muy tocados, y aunque las historias suenen bastante fantasiosas, todas tenían sus pequeños toques mágicos que las hacían realmente únicas y perfectas.
No os quiero contar mucho más por el mero hecho de que podría rozar los spoilers así que, si realmente os encantan los animes de drama, os recomiendo fielmente que lo veáis, porque lloraréis a mares y la disfrutaréis muchísimo.
Nos vemos en la próxima entrada, gracias por leer.
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